En numerosas ocasiones los y las artistas se muestran reticentes a situarse dentro de un género musical específico. Y aunque en principio puede no parecer importante, es una acción clave para el éxito de tu proyecto. Sobre todo si estás dando tus primeros pasos en el mundo de la música.
Hay muchos músicos que no quieren encorsetarse, que trabajan a partir de múltiples influencias, que se ven como inclasificables o que no quieren que su estilo quede asociado a las ideas e imaginarios que llevan asociados según qué estilos musicales.
También ocurre con el público menos puesto en estos temas. Oyentes ocasionales que se abruman ante tanta terminología tan extraña, sus épocas referenciales, escenas, cultura y matices sonoros, alegando que la música es eso, música, en general, sin etiquetas. Particularmente cuando los límites entre propuestas musicales y géneros son difusos.
Pero si tienes un proyecto musical necesitas saber cuál es el estilo que mejor te define. Al menos a grandes rasgos, para empezar.
A continuación, vamos a definir muy brevemente qué es un género musical para tener claro de lo que hablamos y acto seguido entraremos con detalle en por qué es importante.
¿Qué son los géneros musicales?
Los géneros musicales son categorías que sirven para ordenar las diferentes manifestaciones y prácticas musicales de acuerdo a unas características comunes en cuanto al sonido, la composición, instrumentación e interpretación de las canciones.
Pero son mucho más que música. Los géneros musicales son culturas en sí mismas. Generan identidades con las que nos identificamos y crean comunidades que llevan asociados ciertos valores, comportamientos, hábitos y estilos de vida.
5 razones por las que tienes que definir tu estilo musical
A partir de la definición anterior, queda claro que la distinción entre géneros musicales no es un capricho nuestro o de la industria, sino que es una práctica fundamental a la hora de segmentar, localizar y alcanzar a tu público objetivo. Es decir, a la hora de dirigir tu producto.
Los géneros musicales son categorías de marketing muy útiles para artistas, críticos musicales, promotores y discográficas. Así como para el público mismo, que en función de sus preferencias escuchará a unos artistas, se informará en unos medios de comunicación y acudirá a unas salas u otras.
Piensa en el público de AC/DC y en el de Bad Bunny. En el de Pablo Alborán y Steve Aoki. O en el que va al Resurrection Fest y el que asiste al Arenal Sound. Tienen poco que ver, ¿no te parece?
Tu audiencia no es todo el mundo. Tiene unos gustos particulares. De manera que cuanto antes definas tu estilo, antes podrás ponerte manos a la obra para reclamar su atención.
¡Vamos a verlo con más detalle!
1. Medios de comunicación
La prensa musical es un punto fundamental en toda estrategia promocional, por lo que no deberías descuidar este aspecto en tu plan de marketing.
Haz un estudio e indica en qué medios está tu público potencial y ponte en contacto con ellos para que escriban sobre tu último lanzamiento o proponles una entrevista.
Dependiendo de tu estilo escribirás a unos medios medios u otros. Hay una enorme variedad de revistas digitales especializadas en cada género que serán útiles para darte a conocer: rock, electrónica, metal, rap, clásica, funk, reggae, jazz, cumbia…
Sea cual sea el estilo que trabajas, hay una publicación con unos lectores, que son tus oyentes potenciales, interesados en tu música.
No te olvides de incorporar las mejores entrevistas y reseñas a tu Press Kit, que además te será muy útil a la hora de buscar conciertos. Lo que nos lleva al siguiente punto.
2. Promotores
Cada género tiene su circuito de música en vivo. Por ello, una vez definas tu proyecto musical, podrás enfocar mejor la búsqueda de conciertos para localizar las salas y promotores que forman parte de ese circuito. Así como festivales.
Si tienes un proyecto de flamenco, no inviertas esfuerzos en contactar con el programador de una sala que apuesta por el rock o el rap. Tu público está en los tablaos, ferias y concursos. Si lo tuyo es la clásica, en teatros y certámenes.
Los géneros de raíz afroamericana como el blues, el jazz y el soul también tienen sus salas. Así como la música electrónica.
Incluso las bandas de versiones cuentan con su propio circuito de salas, hoteles, restaurantes y ferias.
Plataformas para monetizar tus conciertos en live streaming
3. Discográficas
Las discográficas independientes están viviendo una época dorada. Y hay para todos los gustos.
Por lo general, tienen una línea musical muy bien definida y muchas de ellas trabajan estilos tan específicos como rock psicodélico, garage, afrobeat, shoegaze, jazz fusion, synth pop, etc.
Ellas sabrán valorar tu trabajo, conocen a tu audiencia potencial y a los medios de comunicación afines a tu estilo.
4. Plataformas de música en streaming
Las plataformas de música en streaming se han impuesto como la forma predilecta de consumo musical. Y ahora que proliferan las playlists de todo tipo, etiquetar tu música es más importante que nunca.
Si ya lo era en las tiendas físicas para dirigir al consumidor hacia el estante donde estaba lo que estaba buscando, ahora que tenemos a nuestra disposición toda la música del mundo, de cualquier tiempo y país, organizar adecuadamente los géneros se ha vuelto primordial para que el usuario no se pierda en un océano inabarcable de canciones.
Definir el género de las canciones que subes a las diferentes plataformas de streaming ayuda a los editores de las playlists a ubicarlas en listas de reproducción específicas. En ellas, aumentarás las posibilidades de que los oyentes aficionados a un estilo particular encuentren tus composiciones y terminen formando parte de tu base de fans.
Cómo entrar en una playlist de Spotify
Las plataformas de música como Spotify centran su atención en la experiencia del usuario. Es decir, si un oyente escucha un estilo, en las listas personalizadas les darán recomendaciones automáticas de canciones parecidas a las que escucha y potenciará el descubrimiento de nuevos artistas.
Ocurre igual al contrario. Si un usuario salta una canción porque no es de su estilo, el algoritmo interpretará que no es lo que el oyente está buscando y dejará de mostrárselo, por lo que lo sacará de la lista en cuestión.
¿Qué quiero decir con esto? Que si tienes un grupo de punk, etiquétalo como punk. Incluso como garage o hardcore, si quieres. Pero no como rock and roll, heavy metal o pop rock para intentar llegar a más gente.
Si tu canción termina en una lista de pop rock o heavy metal y no es lo que esperan los oyentes, la saltarán, y Spotify la sacará de su lista. No conseguirás muchas escuchas más. De modo que céntrate en formar parte de las playlists adecuadas para potenciar el alcance.
5. Público
Como has visto, al final todo va encaminado hacia un propósito común: llegar a tu público potencial. Y para ello debes definir tu estilo y trabajar su exposición a través de los canales adecuados. A los sitios donde la audiencia lee sobre música como la tuya, donde la vive en directo y desde donde la escucha y descubre.
Solo así podrás comenzar a ganar notoriedad y hacerte un hueco en un mundo cada vez más competido. Piensa que todos los grandes comenzaron desde abajo, encontrando a su público y fidelizándolo para después ampliarlo.
¡Excelente contenido!
¡Muchas gracias por tu comentario, Francisco!
Un saludo!!
Guay, no siempre se piensa en estas cosas pero puede funcionar,.
¡Muchas gracias por comentar, David!
Efectivamente definir la propuesta de un músico puede ser de mucha utilidad para posicionarla dentro de su público.
Un saludo!